Nuestros programas de pérdida de peso
Luego de una cirugía bariátrica por obesidad, el paciente presenta cambios en el funcionamiento digestivo que llevan a perder peso, pero adicionalmente a una mejoría de las enfermedades asociadas. A continuación, te presentamos los beneficios de la cirugía bariátrica.
Diabetes Mellitus
En la obesidad, el paciente es resistente al efecto de la insulina y esto produce altos niveles de azúcar en sangre. Luego de la cirugía de pérdida de peso, se producen cambios hormonales que mejoran la resistencia a la insulina y mejorando los niveles de azúcar en sangre. Este efecto no sólo hace que se mejoren los niveles de hemoglobina glicosilada, sino que también reduce significativamente la cantidad de medicamentos para tratar la diabetes.
Colesterol y triglicéridos
La dislipidemia (colesterol y triglicéridos elevados) es muy frecuente en la obesidad. Los estudios han demostrado que luego de una cirugía de obesidad, los pacientes mejoran sus niveles de colesterol y triglicéridos en un 70%.
Inmunidad
La obesidad hace que el sistema inmune no responda bien ante las infecciones, especialmente en la producción de anticuerpos (proteínas que combaten las infecciones) y de glóbulos blandos. Luego de una cirugía bariátrica, los pacientes no sólo bajan de peso sino que mejoran su sistema inmunitario.
Corazón
El factor más importante para reducir el riesgo de muerte por enfermedades cardíacas es bajar de peso. Estudios con más de 900.000 pacientes, han demostrado que el exceso de peso se correlaciona de manera directa con el riesgo de muerte por infarto y accidente cerebrovascular. Después de una cirugía bariátrica, se reduce significativamente el riesgo de enfermedad cardíaca y cerebrovascular.
Hipertensión arterial
Cerca del 80% de los pacientes obesos tienen hipertensión arterial. Después de una cirugía bariátrica, se mejoran progresivamente los niveles de presión arterial observándose una mejoría significativa luego del sexto mes de la cirugía.
Articulaciones
Luego de una cirugía bariátrica, reduce la carga sobre las grandes articulaciones como las caderas, rodillas, tobillos y columna, reduciendo el dolor articular y el riesgo de desarrollo de artrosis.
Hígado
El hígado graso es muy frecuente en pacientes con sobrepeso y obesidad. De no controlarse, el hígado graso o esteatosis hepática, puede terminar en una enfermedad incurable del hígado (cirrosis). Los estudios han demostrado que luego de la pérdida de peso con cirugía bariátrica existe una mejoría significativa del hígado graso.
Reflujo
Los pacientes con obesidad tienen 1.5 a 3 veces más reflujo gastroesofágico que las personas delgadas, con el riesgo asociado de esofagitis, esófago de Barret y cáncer de esófago. Luego de una cirugía de bypass gástrico, los pacientes mejoran los síntomas de reflujo de modo similar a cuando son llevados a una cirugía antirreflujo convencional.
Fertilidad
Está demostrado que la obesidad afecta la fertilidad femenina. Cuando hay un índice de masa corporal mayor a 32 kg/m2, hay 2.7 veces más riesgo de presentar infertilidad. De hecho, en mujeres con obesidad, la pérdida de peso debe considerarse como primera línea de tratamiento para la infertilidad, independiente de la presencia o ausencia de síndrome de ovario poliquístico.
Apnea del sueño
Los pacientes con obesidad y apnea del sueño o SAHOS, tienen mayor probabilidad de síndrome metabólico y riesgo cardiovascular. Luego de la cirugía bariátrica, existe una mejoría de la apnea del sueño.
Si consideras que necesitas ayuda para bajar de peso, no dudes en contactarnos. Te invitamos a conocer nuestra clínica y nuestro grupo multidisciplinario de obesidad con protocolos estandarizados y altamente efectivos.
